Fue un lujo escuchar a Diego Amador en el Alcázar. Es uno de los grandes creadores del flamenco contemporáneo, sin duda el más original de los pianistas flamencos desde hace unas décadas, merced a su carácter autodidacta, tanto en su técnica de interpretación como en su forma de concebir lo jondo. Está marcado, por supuesto, por la guitarra flamenca que aprendió desde la infancia. Y por la figura de Camarón, a cuyo repertorio echó mano ayer en las seguiriyas y en los tangos. Su voz es un homenaje continuado al genio de San Fernando, con independencia del repertorio que interprete que, en el caso de ayer, hizo algunas calas, como digo, en las composiciones de los hermanos Paco y Pepe de Lucía. Fue un concierto de piano flamenco con arreglos vocales de mucha calidad también en las Bulerías del Alcázar y en las vibrantes alegrías que fue, junto con el tango porteño, el momento en el que el intérprete se alejó más del canon flamenco contemporáneo, al que volvió en tarantas y cartageneras bellísimas. Las Bulerías del Alcázar, con letra del añorado Carlos Lencero, nos retrotraen al primer disco del músico publicado en 1994. Era un niño. Un niño prodigio.
Para mi gusto, no era necesario el acompañamiento, grabado en directo sobre la marcha, de percusión y teclados que ofreció ayer en los temas rítmicos. Ya su piano es un instrumento de percusión. Y de fantasía. Con incursiones en el jazz latino en rumba y bulerías. Con guiños también a la literatura pianística académica, a su manera, en algunos pasajes. Pero sobre todo, como digo, con un repertorio consolidado del mejor flamenco rítmico de finales del siglo XX. Con una voz vibrante, pletórica, que es un homenaje a Camarón. El intérprete se fue encontrando cada vez más a gusto en la escena y los dos últimos temas que ofreció fueron sendas descargas de energía desbordante. Una pena que no podamos disfrutar más en los escenarios de nuestra tierra de este sevillano.
‘La atmósfera del Alcázar’. Diego Amador: Piano, cante, teclados, percusión. Lugar: Jardines del Real Alcázar. Fecha: Jueves, 24 de julio. Aforo: Lleno.
Imagen: Diego Amador en los jardines el Alcázar. / Actidea